En los niños/as a veces podemos observar dificultades de relación con adultos o con sus iguales. Puede ser que muestren una falta persistente de iniciar y responder a las interacciones sociales o por el contrario muestren una sociabilidad indiscriminada o falta de selectividad al escoger las figuras con las que apegarse (vincularse afectivamente), familiarizándose muy rápido con extraños que les piden cosas o demostrándoles afecto.
También se pueden mostrar agresivos, debido a una falta de empatía o mal control de impulsos y tienen dificultades para comprender cómo su comportamiento afecta a los demás. A veces atacan y dañan a los otros aparentemente sin remordimientos.
Estos niños suelen padecer el Trastorno de Apego Reactivo. Pueden demostrar una extensión amplia de problemas emocionales tales como síntomas depresivos y ansiedad o comportamientos que buscan la seguridad, como abrazarse a extraños y mostrarse muy cariñosos. También pueden mostrar comportamientos estereotipados como oscilación, golpeteo de la cabeza, morder, arañarse, cortarse… síntomas que aumentarán en situaciones de estrés.
El Trastorno de Apego Reactivo se asocia al cuidado inadecuado o patológico que desatiende las necesidades emocionales y físicas básicas del niño, especialmente en los 2 primeros años de vida. En algunos casos puede deberse a cambios frecuentes en la persona principal que cuida de el niño o cuando ésta no responde a sus necesidades físicas y emocionales o responde abusivamente, en estos casos el niño no desarrolla la capacidad de relacionarse de una manera sana y es incapaz de crear vínculos significativos y confiar en los demás.
Es usual encontrar estas dificultades en niños/as adoptados, en situación de acogida o que han padecido negligencias o abusos por parte de sus cuidadores.
Es necesario intervenir en estos casos y darles la oportunidad a estos niños de reparar el apego, su capacidad de vincularse, para que puedan establecer relaciones satisfactorias con los demás y desarrollarse como adultos felices y seguros
No necesariamente los niños con dificultades similares padecen el Trastorno de Apego Reactivo, pero de igual modo los problemas de relación deben ser abordados puesto que juegan un papel esencial en el desarrollo de un apego seguro y la afectividad del individuo.